Una orquesta sinfónica es uno de los máximos exponentes de la belleza musical. La consonancia entre instrumentos, la interpretación de las grandes obras de la música nacional e internacional… Todo debe estar atado hasta al más mínimo detalle. Por eso, los ensayos son una de las partes fundamentales de una orquesta sinfónica. Nada saldría bien si los artistas que la conforman no ensayaran duro durante muchos meses.
En concreto, hoy queremos hablarte de ello: de lo importante que es formarte y ensayar durante mucho tiempo para que un concierto puntual de unas pocas horas salga a la perfección. Los ensayos de las orquestas sinfónicas varían mucho dependiendo de la formación de la que hablemos. Como dice el dicho… «Cada maestrillo tiene su librillo». Por lo tanto, no podemos ofrecerte a guía definitiva sobre cómo se llevan a cabo los ensayos de una orquesta sinfónica, pero sí podemos contarte cómo lo hacen algunas de ellas.
En primer lugar, como ya sabes, las orquestas sinfónicas están formadas por distintos grupos de instrumentos, que se organizan dependiendo de la familia a la que pertenecen. Por lo tanto, como puedes intuir, durante las primeras semanas se llevan a cabo ensayos únicos en cada familia de instrumentos. Una vez que todo está claro en este ámbito, pasamos a los ensayos generales donde se reúnen todos los grupos de instrumentos. ¡Es la hora de la verdad! Tienen que mostrar lo que han aprendido por separado y darse cuenta de cómo queda en el conjunto. Aquí, el papel del director de orquesta es fundamental.